Afecta directamente la capacidad del Comité para proteger y promover los derechos del niño, en un momento en que la situación global podría hacer que esta protección sea aún más crucial.
Ginebra, 30 de marzo de 2024 – El Comité de Derechos del Niño de las Naciones Unidas enfrenta una crisis financiera sin precedentes, lo que ha llevado a la cancelación de una sesión esencial programada para abril en Ginebra, Suiza.
Esta situación se debe a la falta de fondos provocada por el incumplimiento de las contribuciones financieras de varios Estados miembros.
A finales de 2023, solo el 70% de las contribuciones esperadas habían sido recibidas por la organización, marcando la peor crisis de liquidez en casi una década.
Esta deficiencia ha afectado gravemente la capacidad operativa del Comité, limitando su habilidad para defender y promover los derechos humanos en un momento crítico donde el mundo enfrenta conflictos armados, cambio climático e inseguridad alimentaria.
El Comité ha expresado su profunda preocupación por cómo esta crisis limita su capacidad para mantener interacciones fundamentales con niños, organizaciones de la sociedad civil y agencias de la ONU.
Estas conversaciones son cruciales para evaluar y promover el cumplimiento de los Estados parte con sus obligaciones en materia de derechos humanos.
La cancelación de la pre-sesión no solo afecta la protección de los derechos de la niñez a nivel global, sino que también aumenta el retraso acumulativo en el trabajo del Comité, ya agravado por la pandemia de COVID-19.
Distinguidos exmiembros y líderes del Comité de Derechos del Niño, incluyendo a Jorge Cardona, Yanghee Lee, Norberto Liwski, Marta Maurás, Rosa María Ortiz, Sara Oviedo, José Ángel Rodríguez, Marta Santos Pais, Jean Zermatten, Amal Al-Dossari, Renate Winter, María Herzog, Clarence Nelson, Gehad Madi, Nevena Vukovich Sahovic, y Esmeralda Arosemena, han hecho un llamado urgente a los Estados miembros para que cumplan con sus compromisos financieros.
Estos líderes destacan la necesidad de actuar con la urgencia que los tiempos actuales requieren y reafirmar el compromiso con la protección y promoción de los derechos de todos los niños y niñas.
El mundo se encuentra en un momento histórico de desafíos sin precedentes.
La protección de los derechos de la niñez debe ser una prioridad inquebrantable para cada país, sociedad y líder.
El futuro de millones de niños en todo el mundo depende de la capacidad de la comunidad internacional para responder a esta llamada de acción con responsabilidad y urgencia.