«Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar, leal y patrióticamente, el cargo de Presidenta de la República que el pueblo me ha concedido…»
Ciudad de México, 1 de octubre de 2024 – Este día quedará grabado en la historia como un hito para México. Claudia Sheinbaum Pardo ha tomado protesta como la primera mujer presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, un evento que marca el inicio de una nueva era en la política del país.
«Soy madre, abuela, científica y mujer de fe; y, a partir de hoy, por voluntad del pueblo de México, la presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos», declaró Sheinbaum al tomar protesta en una ceremonia que reunió a líderes políticos, sociales y representantes de 105 países. La frase, que resonó con fuerza en el recinto, subrayó su identidad y el amplio espectro de sectores a los que representa.
En su discurso, celebra la historia y el legado de México, destacando la importancia de la diversidad cultural y los avances sociales logrados a lo largo de los siglos. Al resaltar figuras históricas como Hidalgo, Morelos, Zapata, de Leona Vicario, «Madre de la Patria», y otros, mostrando en su narrativa de orgullo nacional, mostrando a México como una nación rica en cultura, biodiversidad, y luchas por la justicia y la libertad. Además, se subraya la relevancia de las mujeres en la historia de México, en consonancia con el mensaje de que «es tiempo de transformación y es tiempo de mujeres», vinculando esta afirmación con el contexto de la Cuarta Transformación y el protagonismo femenino en la política actual.
El triunfo de la lucha feminista y los movimientos sociales
Sheinbaum resaltó la importancia de su elección como un triunfo para el feminismo y para los movimientos sociales que, durante siglos, han exigido el reconocimiento y la participación de las mujeres en los espacios de poder. «Presidenta con A, porque lo que no se nombra no se reconoce», afirmó, haciendo un llamado a visibilizar el papel de las mujeres en todos los ámbitos, incluyendo aquellos tradicionalmente dominados por hombres, como la política y las fuerzas armadas.
Durante la ceremonia, la banda presidencial le fue entregada por la maestra Ifigenia Martínez, destacada figura de la política mexicana, lo que añadió un componente simbólico a la ceremonia al subrayar la sororidad entre las mujeres que han sido clave en la transformación política del país.
Compromisos internacionales y continuidad del «humanismo mexicano»
En su primer mensaje como presidenta, Sheinbaum se dirigió a representantes de 105 países presentes, reafirmando el compromiso de México con la comunidad internacional. Hizo un reconocimiento a su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, calificándolo como «el mejor presidente de la historia reciente», y aseguró que su administración continuará con el enfoque del «humanismo mexicano», una política centrada en los derechos sociales y el bienestar de las personas.
Seguridad, comercio y trenes: prioridades del nuevo gobierno
Entre los principales retos de su administración, Sheinbaum destacó la necesidad de fortalecer los acuerdos comerciales con Estados Unidos y Canadá, en el marco del T-MEC, para garantizar la estabilidad económica del país. Asimismo, anunció una ambiciosa iniciativa para impulsar los trenes de pasajeros como parte de su estrategia de conectividad y desarrollo regional, un proyecto que busca detonar el crecimiento económico en zonas rezagadas del país.
En materia de seguridad, su estrategia se centrará en atender las causas profundas de la violencia, reforzar la inteligencia e investigación, así como fortalecer la Guardia Nacional. También destacó la coordinación con las autoridades locales y su compromiso con la «cero impunidad»,aseveró, destacando la importancia de la coordinación con las autoridades locales en la lucha contra el crimen organizado.
Un nuevo capítulo en la historia de México
Con una mezcla de emoción y firmeza, Sheinbaum concluyó su discurso con un llamado a la unidad nacional y a seguir escribiendo la historia del país con justicia y equidad: «Pondré todo mi conocimiento, mi fuerza y mi corazón para servir a México». Con estas palabras, inició formalmente un mandato que no solo es histórico por ser el primero liderado por una mujer, sino también por las expectativas de transformación social y económica que trae consigo.
El mensaje de Sheinbaum, que combinó emoción y firmeza, deja claro que su administración buscará profundizar las políticas sociales iniciadas en los últimos años, pero con un enfoque renovado que priorice la inclusión y el bienestar de todos los sectores de la población.
La sesión del Congreso de la Unión culminó con la entonación del himno nacional, marcando el cierre de un día histórico para la nación.