Por RealidadesMx
Tampico, Tamps., octubre de 2025. — El Gobierno Municipal de Tampico volvió a apostar por la estrategia de “proximidad social” con una nueva Jornada de Bienestar en la colonia Revolución Verde. El evento, encabezado por la Secretaría de Bienestar Social, buscó llevar servicios y apoyos a los sectores más vulnerables, pero también reforzar la imagen de un gobierno cercano y sensible, en un contexto donde la ciudadanía exige resultados más que discursos.
El titular de la dependencia, Omar Fabbri Flores, destacó que estas acciones reflejan el compromiso de la alcaldesa Mónica Villarreal Anaya con un “Tampico humano y participativo”, donde el bienestar se conciba como un derecho. La narrativa, aunque coherente con el discurso social del actual gobierno, enfrenta el reto de traducirse en políticas sostenibles y con impacto medible.
Durante la jornada se instalaron módulos de salud, atención ciudadana, Registro Civil, Comapa, Instituto de la Mujer, Protección Animal y servicios como cortes de cabello, venta de abarrotes a bajo costo y exámenes visuales. También se entregaron 50 baumanómetros a pacientes hipertensos, una acción simbólica que apunta a fomentar la prevención, aunque insuficiente frente a los desafíos estructurales del sistema de salud local.
Otro punto destacado fue la entrega de diplomas del ITEA a personas que concluyeron su educación básica, un esfuerzo que busca visibilizar la superación personal en comunidades con rezago educativo.
El programa “Cuidadoras Casa por Casa” recibió mención especial por su innovación social: promueve el cuidado comunitario y la creación de Bancos de Tiempo para apoyar a madres y padres trabajadores. Sin embargo, especialistas consultados advierten que su sostenibilidad depende del seguimiento institucional y la asignación presupuestal a largo plazo.
En su cierre, Fabbri Flores reiteró que estas jornadas “reafirman el compromiso del gobierno municipal con la ciudadanía”. No obstante, en un Tampico donde persisten desigualdades y limitaciones en servicios básicos, el desafío será que estas acciones no queden solo en el terreno del gesto simbólico, sino que se conviertan en políticas permanentes de bienestar con indicadores reales de cambio.
