• 20 de septiembre de 2024 10:16 pm

Un reciente análisis del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY) revela la verdadera magnitud de la crisis del sistema de salud en México, contradiciendo las versiones oficiales que minimizan el problema. De acuerdo con el informe, el sistema enfrenta serias limitaciones estructurales y financieras que ponen en riesgo la calidad de los servicios de salud, afectando especialmente a la población más vulnerable.

Estancamiento en la esperanza de vida
Uno de los datos más preocupantes es el estancamiento de la esperanza de vida en el país, que se ha mantenido en 74.8 años desde 2014, sin mejoras significativas hasta 2022. Este dato refleja el impacto negativo de las deficiencias en el acceso a una atención médica oportuna y de calidad, especialmente en un contexto de creciente violencia y enfermedades crónicas no transmisibles.

Subfinanciamiento crónico
El informe destaca que México destina solo el 3% de su Producto Interno Bruto (PIB) a salud, una cifra alarmantemente baja si se compara con la recomendación internacional del 6%. Este subfinanciamiento se traduce en un sistema que opera con recursos insuficientes, afectando la disponibilidad de medicamentos, equipo médico y personal capacitado. La falta de inversión agrava las desigualdades en el acceso a los servicios, dejando a amplios sectores de la población sin atención adecuada.

Avances limitados en salud pública
En términos de indicadores de salud pública, México ha mostrado avances mínimos en comparación con otros países de América Latina y el Caribe. A pesar de algunos esfuerzos, la infraestructura y la cobertura de salud continúan rezagadas, lo que ha hecho que las mejoras en la calidad de vida y bienestar de la población sean insuficientes.

Epidemia de sobrepeso y obesidad
Otro aspecto destacado en el análisis del CEEY es la creciente prevalencia de sobrepeso y obesidad, que afecta tanto a adultos como a niños. Esto ha impulsado un aumento en las enfermedades no transmisibles, como la diabetes y la hipertensión, que están sobrecargando el ya debilitado sistema de salud. Las medidas de prevención y control han sido ineficaces, lo que representa un desafío de largo plazo para las políticas de salud pública.

Conclusiones
El informe del Centro de Estudios Espinosa Yglesias expone una realidad que dista mucho de las versiones oficiales que intentan restar importancia a la crisis del sistema de salud en México. La falta de inversión, la ineficiencia en la prestación de servicios y la creciente carga de enfermedades crónicas están afectando gravemente a la población. Urgen reformas estructurales profundas para corregir el rumbo y garantizar un acceso equitativo y eficiente a la salud en todo el país.

Este análisis es un llamado a las autoridades para que prioricen la salud pública, con el fin de evitar que la crisis actual continúe deteriorando el bienestar de millones de mexicanos.