Ciudad de México, 15 de agosto de 2024 — Claudia Sheinbaum ha hecho historia al convertirse en la primera mujer en alcanzar la presidencia de México. En una ceremonia solemne, recibió su constancia de mayoría de manos de Mónica Soto Fregoso, presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Este evento marca un hito significativo en la política mexicana, subrayando la creciente participación y liderazgo femenino en el país.
En su discurso de aceptación, Sheinbaum celebró la confianza depositada en su proyecto, al obtener más de 35 millones de votos, lo que representa entre el 59% y 76% de la votación total. Este resultado, sin precedentes en la historia electoral mexicana, refleja, según la nueva mandataria, «la conciencia histórica y la fuerza colectiva del pueblo». Sheinbaum enfatizó que su victoria no solo es personal, sino un triunfo compartido con todas las mujeres de México.
Sheinbaum delineó su visión de gobierno, prometiendo un enfoque centrado en la paz y la justicia. «No regresará la guerra contra el narcotráfico», aseguró, comprometiéndose a atacar las causas estructurales de la violencia en lugar de recurrir a estrategias militarizadas. Además, reafirmó su compromiso con la construcción de un sistema de justicia equitativo, que garantice los derechos de todos los mexicanos, sin importar su condición económica.
La presidenta electa también subrayó su determinación de actuar con honestidad y de respetar la independencia de los poderes del Estado, una declaración que busca reafirmar la confianza en las instituciones democráticas del país.
El evento contó con la presencia de destacados líderes políticos y figuras clave del sistema judicial, incluyendo a los ex contendientes en la elección interna de MORENA, Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Manuel Velasco y Gerardo Fernández Noroña, así como la secretaria general de MORENA, Citlalli Hernández, y la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña.
Este acto no solo celebra la victoria de Sheinbaum, sino que también simboliza un nuevo capítulo en la historia política de México, con la promesa de un liderazgo orientado a la construcción de un futuro más justo y pacífico.