Trabajadores del Hospital IMSS-Bienestar “Dr. Carlos Canseco” mantienen un plantón indefinido para exigir solución a rezagos laborales que arrastran desde hace más de un año, incluyendo falta de personal, irregularidades administrativas y la presencia de “comisionados fantasma”, sin que hasta ahora las autoridades hayan instalado una mesa de diálogo efectiva.
Tampico, Tamaulipas, 08 de diciembre de 2025. — La tensión laboral en el Hospital IMSS-Bienestar “Dr. Carlos Canseco” estalló tras más de un año de silencio institucional. Decenas de trabajadores mantienen un plantón en el exterior del hospital para denunciar lo que califican como un abandono prolongado, marcado por rezagos administrativos, falta de personal y presuntas irregularidades internas que las autoridades no han atendido.
La movilización, encabezada por la secretaria general del Sindicato de Trabajadores de Salud del nosocomio, Concepción Romero Hernández, busca exhibir lo que consideran vicios estructurales dentro del sistema IMSS-Bienestar. Entre los reclamos sobresalen la cobertura de vacantes con años sin resolverse, la rezonificación para personal con responsabilidades mayores a su código, la regularización de contratos pendientes de la transición al nuevo modelo y la eliminación inmediata de “comisionados fantasma”: trabajadores que cobran sin presentarse a laborar.
Los inconformes también acusan sobrecarga extrema, con jornadas de hasta 34 horas continuas para personal transferido y un manejo discrecional de las plazas que —afirman— favorece a personas sin vínculo laboral ni antigüedad, por encima de trabajadores con derechos adquiridos.
Romero Hernández subrayó que la falta de personal ha generado cuellos de botella en los movimientos internos y una presión operativa que ha rebasado al personal activo. “Hemos tenido paciencia, pero ya pasó más de un año sin avances reales”, reprochó.
Pese al plantón, los servicios médicos continúan activos, aunque los trabajadores advierten que la situación es insostenible. La dirigencia sindical anuncia que la protesta se mantendrá de forma indefinida hasta que se instale una mesa de diálogo real con las autoridades.
“El llamado es simple: condiciones dignas y respeto. Nuestra lucha es justa y necesaria”, sentenció Romero Hernández.

