• 2 de diciembre de 2025 2:12 am
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El cuidado: la barrera invisible que sostiene la desigualdad en Nuevo León

PorREALIDADESMX

Dic 1, 2025

“Aunque este estado supera al país en movilidad social, el origen y la desigualdad mantienen rezagado al 37 % de la población”

Monterrey, Nuevo León.—El Informe de Movilidad Social en Nuevo León 2025 aporta un dato que debería encender alertas feministas: quienes realizan labores de cuidado tienen cinco veces menos probabilidades de ascender y más del doble de riesgo de caer al estrato con menos recursos. Y tres de cada cuatro de esas personas son mujeres.
Estos números confirman lo que el feminismo ha señalado durante décadas: el sistema económico depende del trabajo no remunerado de las mujeres, pero ese mismo trabajo las empuja a la precariedad, limita su desarrollo profesional y reproduce la desigualdad estructural.

La ausencia del mercado laboral en la discusión
El estudio no cuestiona la estructura laboral de Nuevo León, que:
Prioriza sectores industriales masculinizados.
Tiene baja oferta de empleos con flexibilidad.
Castiga las trayectorias laborales interrumpidas por maternidad o cuidados.
La movilidad real de las mujeres depende tanto de políticas de cuidados como de transformaciones en el mercado laboral, tema que el informe no aborda.
Conclusión feminista
El informe aporta datos valiosos, pero confirma que no habrá movilidad social plena ni igualdad real mientras el cuidado siga siendo una responsabilidad impuesta casi exclusivamente a las mujeres.
La movilidad en Nuevo León es más alta que en el resto del país, pero no es igual para todas las personas: las mujeres —especialmente las cuidadoras— siguen avanzando en una cuesta más empinada.

La penalización del cuidado
El estudio demuestra que cuidar —de un niño, una persona mayor o alguien con discapacidad— sigue siendo una de las actividades más castigadas en términos económicos.
Las consecuencias para las mujeres incluyen:
Menor participación laboral.
Brechas salariales acumuladas.
Menor acceso a prestaciones y seguridad social.
Mayor desgaste emocional y carga mental.
El informe reconoce estas afectaciones, pero no profundiza en su raíz: la organización social del cuidado sigue asignando esta responsabilidad casi exclusivamente a las mujeres.

Políticas de cuidados: avances sin evaluación
Aunque Nuevo León aparece como pionero al crear una Comisión Estatal de Cuidados e incluir programas en la Ley de Egresos, el texto no detalla:
Cuánto presupuesto se destina.
Si existe cobertura territorial amplia.
Cómo se garantizará la corresponsabilidad del sector privado.
Si las medidas impactan realmente la autonomía económica de las mujeres.
Es decir, hay arquitectura institucional, pero todavía poca transformación real.Movilidad limitada por el origen… y por el género
El informe subraya que 26 % de la desigualdad proviene del origen socioeconómico, pero no cruza el dato con género.
Un verdadero análisis feminista preguntaría:
¿Cuántas mujeres logran la misma movilidad que los hombres?
¿Qué pasa con las mujeres que nacen en los estratos más bajos y además cuidan?
¿Qué peso tiene la maternidad en la movilidad social?
¿Qué pasa con las mujeres migrantes, indígenas o trabajadoras informales en el estado?
Sin estas respuestas, la movilidad reportada es parcial y probablemente sobreestimada para las mujeres.